El concepto productividad es un término global para diferentes ámbitos de la vida, no solo laboral, pero si bien es cierto que muchos empresarios a día de hoy ya toman conciencia sobre la importancia de la productividad y por ello se cuestionan si los protocolos de trabajo de la empresa ayudan o destruyen la productividad de los empleados. Pero, ¿sabemos qué es la productividad?
La productividad es la optimización de un conjunto de recursos y estrategias de trabajo que busca como resultado la máxima eficacia de cada persona para lograr un objetivo determinado.
A día de hoy, la mayoría de directivos tienen conciencia de los múltiples beneficios que puede aportar una buena estrategia para el aumento de productividad, aunque para poder tangibilizar esos resultados es necesario un cambio de chip en nuestras mentes y cultura de empresa, porque la productividad se ha desarrollado a la vez que los procesos de trabajo, y actualmente que un trabajador haga más horas no es sinónimo de mayor calidad o cantidad, sino de mayor frustración y estrés del personal, y esto último, como ya sabemos, es un grave problema.
La productividad es un concepto que no opera independiente, por lo que hay que tener en cuenta una serie de factores como la calidad, la eficiencia o la intensidad del trabajo, para que tu plan sea un éxito y así conseguir aumentar la producción.
Por ello, como imaginamos que en tu empresa tienes como meta alcanzar niveles más altos de productividad laboral, hoy vamos a explicarte las claves para aumentar la productividad de manera duradera y las tendencias más actuales que benefician a empleados y empresarios.
Por un lado tendríamos las claves para construir la productividad encima de unos cimientos seguros y fiables. Pero siempre teniendo en cuenta las variables implícitas del proceso que deberás conseguir que todas juntas tengan el mismo sentido.
Planificación
El equipo directivo de cualquier empresa debería ser capaz de llevar a cabo una buena previsión y planificación estratégica que defina los intereses y acciones para alcanzar el objetivo, para posteriormente comunicarlo a los trabajadores correspondientes y que ellos sean capaces de autogestionarse.
Hoy en día el perfil más buscado por los reclutadores de talento son personas autónomas, capaces de hacer listas de tareas para poder planificar su horario según la prioridad de cada una de ellas. Es decir, buscar personas con capacidad organizativa alta puede resultar clave para la productividad de la empresa.
Evitar distracciones
Evitar a toda costa los ladrones de tiempo. Mirar cada 10 minutos el Whatsapp, o nuestros perfiles en redes sociales solo servirá para perder nuestro tiempo de trabajo. Estas son acciones muy comunes, pero los ladrones de tiempo pueden estar entre las mismas tareas de trabajo, por lo que analiza las tareas para saber si son indispensables o secundarias.
Pausas controladas
Descansar la vista 5 minutos o bajar a hacer un café no es una distracción, es una necesidad. Que, además, ayudará a mejorar la productividad. Y también reduce el índice de enfermedad laboral porque nuestro cerebro tiene minutos para desconectar, y relajarse.
Las tendencias actuales que vienen pisando fuerte por que está demostrado que generan un aumento de la productividad empresarial y bienestar personal que se convierte en mucha felicidad a la empresa son:
Descanso activo
Las empresas más atrevidas están apostando fuerte por crear sitios de descanso pensados para incrementar las relaciones personales, o repletos de distracciones no vinculantes con las tareas de la empresa, como podrían ser juegos de mesa, dardos en la pared o una pizarra para que cada empleado dibuja y/o escriba lo que quiera. Esta pequeña acción reporta un buen número de sonrisas entre los empleados porque no se ven agobiados ni obligados a estar cada minuto delante del ordenador.
Formación continua
Conocido como M-Learning. Es un aprendizaje continuado a través del móvil. Este tipo de formación es muy versátiles y las lecciones deben ser breves para incrementar su uso. Son una muy buena manera de mantener la motivación laboral alta, a la vez que el conocimiento de los empleados mejora y se actualiza junto con la evolución de la empresa.
Estas pequeñas formaciones no son sólo nuevos conocimientos para los empleados, sino que también los podéis usar como herramienta de comunicación en caso de que la empresa introduzca algún software nuevo.
Teletrabajo
Muchísimas empresas apuestan por el trabajo desde casa ya que son muchas las ventajas tanto para el empresario como para el trabajador. Desde la reducción del coste de equipamiento informático hasta la mejor conciliación entre vida laboral y personal, o simplemente el ahorro de transporte y de tiempo de desplazamiento.
Esto es un acto de confianza del empresario al empleado, y el retorno es un aumento de la productividad y de la motivación.
Para que salga bien la búsqueda de la productividad entre tus empleados debes conocerlos tan bien como a tu público objetivo. Para poder ofrecer lo que les lleve a trabajar mejor, en menor tiempo y con más bienestar personal. Porque al fin y al cabo las empresas a través de la productividad buscan rentabilizar su inversión en capital humano.
Ahora que ya tienes las claves y acciones que puedes implementar para una mayor productividad en tu empresa debes saber que la implantación de las nuevas acciones deberán introducirse en el equipo poco a poco, porque si llegas con mil cambios lo único que lograrás es agobiar a los empleados, y será contraproducente.
Acuérdate que el objetivo principal es la mejora de la calidad del trabajo que ofreces a tus empleados, y es un valor que merece el esfuerzo de ser alcanzado y mantenido para disfrutar de una perfecta sintonía entre el cuerpo y mente, gracias a una mejora en la conciliación entre la vida personal y la laboral.
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