Un plan de onboarding es la culminación de una buena estrategia de captación de talento. Se trata de las acciones llevadas a cabo por una empresa y que son necesarias para las nuevas personas se adapten a las dinámicas de la organización.
El objetivo de este plan es claro: ofrecer a los recién llegados los recursos necesarios para que se sientan cómodos, se sientan parte de la empresa y puedan comenzar a desarrollar sus tareas de la manera más sencilla.
Según un estudio del Brandon Hall Group, un proceso de onboarding aumenta la tasa de retención de nuevo talento en un 82%, y la productividad crece en más de un 70%.
Beneficios de un proceso de onboarding
Con esta planificación, tanto los trabajadores como la empresa, saldrán beneficiados.
- Crea un mayor vínculo entre la empresa y el empleado.
- Disminuye el riesgo de fracaso, ya que los nuevos miembros del equipo están acompañados en todo momento durante su integración.
- Tiene un impacto positivo en la retención de talento en la empresa.
- El nuevo trabajador aprende mucho más rápido, por lo que su productividad se incrementa.
- Ayuda a promover la cultura corporativa.
- El riesgo de cambio de empresa se reduce, por lo que la tasa de rotación es mucho menor.
Pasos para realizar una plan de onboarding exitoso
- Proceso de selección. Una buena estrategia de integración debe comenzar durante el propio proceso de selección, ya que la primera impresión que un candidato se lleva de una empresa es muy importante. En este sentido, hay que atender que la oferta de trabajo sea clara y honesta con el puesto que se está ofreciendo y, además, que el contacto con el candidato durante el proceso de selección sea fluido y no se sientan olvidados.
- Proporcionar el material necesario para el trabajo. Una vez que el candidato ha sido seleccionado por la empresa, el ya nuevo miembro del equipo debe recibir todos los materiales para realizar correctamente su trabajo y, que el día de su incorporación, esté preparado su puesto de trabajo, configurado su dirección de correo electrónico, etc.
- Tener una persona de referencia. Los conocidos como “mentores” son las personas a las que las nuevas incorporaciones pueden acudir ante cualquier duda sobre la organización de la empresa. Este apoyo personal es muy importante, especialmente durante la primera semana de trabajo.
- Mantener informado al resto del equipo. Es importante que todas las personas en la empresa conozcan que habrá una nueva incorporación, sobre todo para que esta persona no se sienta extraña en los primeros días.
- Kit de bienvenida. Un detalle muy apreciado son los packs de bienvenida, que pueden incluir un desayuno para comenzar con la mejor energía su nueva andadura profesional, material de escritorio personalizado, etc.
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